Johnny Depp y Marion Cotillard estuvieron muy acogedores en la fiesta de la premiere en Chicago de Public Enemies la noche del miércoles:
Depp anunció el film después de encontrarse con fans en la alfombra-roja y entonces irse a la after-party junto con Bale, Cotillard y el director Michael Mann en el River East Art Center. Depp sólo permaneció durante unos 30 minutos antes de dirigirse a Gibsons para una fiesta privada. De todas formas, Cotillard y Depp parecieron tener su propia fiesta privada. La actriz francesa y Depp, que vive en Francia, se sentaron en una esquina y pasó la mayor parte de la noche hablando en francés durante varias botellas de vino.
“Ellos estaban en su pequeño mundo hablando en francés”, según testigos presenciales. “Ellos parecían muy cercanos y cómodos el uno con el otro.”
La pareja se quedó en el restaurante hasta casi las 3 de la madrugada y se fuerón a través de una salida privada. Cotillard, aunque tenía su propio coche, ella saltó al SUV de Depp.
Un Depp ebrio cedió la ayuda de su guardaespaldas cuando tropezó con su vehículo y Cotillard cubrió su cara con platos del restaurante a pesar de que no estuvieron presentes los paparazzi.
Las dos mega-estrellas regresaron a su hotel swank juntos y entraron a través de garajes privados.
Depp anunció el film después de encontrarse con fans en la alfombra-roja y entonces irse a la after-party junto con Bale, Cotillard y el director Michael Mann en el River East Art Center. Depp sólo permaneció durante unos 30 minutos antes de dirigirse a Gibsons para una fiesta privada. De todas formas, Cotillard y Depp parecieron tener su propia fiesta privada. La actriz francesa y Depp, que vive en Francia, se sentaron en una esquina y pasó la mayor parte de la noche hablando en francés durante varias botellas de vino.
“Ellos estaban en su pequeño mundo hablando en francés”, según testigos presenciales. “Ellos parecían muy cercanos y cómodos el uno con el otro.”
La pareja se quedó en el restaurante hasta casi las 3 de la madrugada y se fuerón a través de una salida privada. Cotillard, aunque tenía su propio coche, ella saltó al SUV de Depp.
Un Depp ebrio cedió la ayuda de su guardaespaldas cuando tropezó con su vehículo y Cotillard cubrió su cara con platos del restaurante a pesar de que no estuvieron presentes los paparazzi.
Las dos mega-estrellas regresaron a su hotel swank juntos y entraron a través de garajes privados.
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