Fuente: ANSA
Los trajes de superhéroe le incomodan al actor estadounidense Johnny Depp, quien afirma que su masculinidad se revela en su papel de "superpapá", reveló en una entrevista con ANSA en la que habla de su vida como estrella de cine, un lugar social siempre reñido entre lo público y lo privado.
"¿Qué cosa me convierte en hombre? Ser un gran padre para mis hijos Jack y Lily Rose: es todo lo que deseo", afirmó el actor.
"Así como en el set no me veo en los trajes de superhéroe, tipo Superman, y prefiero los papeles de malo, en la vida privada la única cosa que me importa es ser un superpapá", agregó.
El galán, recordado protagonista del filme "Don Juan De Marco", habló también de los inconvenientes de la fama.
"Se está perdiendo el sentido de individualidad: la tecnología nos ha dado la posibilidad de vivir en modo simple. Hoy solo cuenta el voyeurismo, del que el reality show representa la última frontera", sostuvo.
El asedio de la prensa decidió hace algunos años a Depp a cambiar de morada en busca de una vida más tranquila.
"Vivo en Francia con mi compañera (la actriz Vanessa paradis), donde la vida es muy simple, lo que representa un lujo para mí: vivimos en el campo, lejos de las llamadas telefónicas de productores y representantes artísticos", relató.
"Me falta el anonimato, caminar por la calle sin ser reconocido. Sería fantástico llevar a mis hijos a un negocio o a un restaurante, a Disneylandia o a cualquier otro sitio sin que esos actos se consideren algo extraordinario", lamentó.
En ese sentido, Depp tiene un gran sueño: parecerse al inaferrable ganster John Dillinger que interpretó en el filme "Enemigo Público".
"El tenía la capacidad de mimetizarse, de pasar inadvertido. Pero eran otros tiempos, los hombres eran 'verdaderos hombres', dueños de su individualidad. Creo que si él volviese a la Tierra por un día, escaparía gritando desesperadamente", concluyó.
Los trajes de superhéroe le incomodan al actor estadounidense Johnny Depp, quien afirma que su masculinidad se revela en su papel de "superpapá", reveló en una entrevista con ANSA en la que habla de su vida como estrella de cine, un lugar social siempre reñido entre lo público y lo privado.
"¿Qué cosa me convierte en hombre? Ser un gran padre para mis hijos Jack y Lily Rose: es todo lo que deseo", afirmó el actor.
"Así como en el set no me veo en los trajes de superhéroe, tipo Superman, y prefiero los papeles de malo, en la vida privada la única cosa que me importa es ser un superpapá", agregó.
El galán, recordado protagonista del filme "Don Juan De Marco", habló también de los inconvenientes de la fama.
"Se está perdiendo el sentido de individualidad: la tecnología nos ha dado la posibilidad de vivir en modo simple. Hoy solo cuenta el voyeurismo, del que el reality show representa la última frontera", sostuvo.
El asedio de la prensa decidió hace algunos años a Depp a cambiar de morada en busca de una vida más tranquila.
"Vivo en Francia con mi compañera (la actriz Vanessa paradis), donde la vida es muy simple, lo que representa un lujo para mí: vivimos en el campo, lejos de las llamadas telefónicas de productores y representantes artísticos", relató.
"Me falta el anonimato, caminar por la calle sin ser reconocido. Sería fantástico llevar a mis hijos a un negocio o a un restaurante, a Disneylandia o a cualquier otro sitio sin que esos actos se consideren algo extraordinario", lamentó.
En ese sentido, Depp tiene un gran sueño: parecerse al inaferrable ganster John Dillinger que interpretó en el filme "Enemigo Público".
"El tenía la capacidad de mimetizarse, de pasar inadvertido. Pero eran otros tiempos, los hombres eran 'verdaderos hombres', dueños de su individualidad. Creo que si él volviese a la Tierra por un día, escaparía gritando desesperadamente", concluyó.
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